martes, 29 de marzo de 2011

Número XLIII: Vuelvo, vida vuelvo ♫

Uff. Es difícil esto de volver a sentarse frente a una pantalla, con un espacio cas infinito para llenar y llenar de caracteres que poco a poco van formando palabras, y éstas frases, las que se convierten en el fluir de conciencia de mi actual Yo mismo. Más que difícil, diría que es raro, o bien la falta de costumbre -o la pérdida de ella- hace que el escribir en un espacio en blanco sea, al menos en un principio, una suerte de dulzura tortuosa, ese agridulce picor que queda una vez que tomas Tequila con limón y sal; me refiero a que molesta, sabes de sobra que trae consecuencias pero aun así lo haces, por que así es la vida, es el gusto de hacerlo y averiguar al día siguiente si lo hecho trajo cosas buenas o simplemente una de esas cañas que es preferible olvidar...
Al escribir pasa lo mismo. No sabes hasta qué punto llegas escribiendo, puede ser un cuento, una novela, una entrada para un blog, o tu carta de despedida, puede que al empezar tengas una idea 100% clara de lo que quieres decir, de lo que tienes que decir, de lo que vas a decir, pero al final del día el papel aguanta mucho -demasiado- y termina doblándole la mano al destino y a uno mismo, y acabas derramando litros y litros de tinta en un hueco vacío, que por más veces que escribas y sobreescribas en él, cuando lo dejes a un lado para hacer otra cosa, el vacío sigue estando ahí. Bueh, me he alargado lo suficiente y creo que ya es hora de empezar...

Volví de un gran viaje -el primero de muchos que vendrán-, y me siento extraño. Desde que puse un pie en mi casa que las cosas no han ido viento en popa aunque claro, no me puedo quejar, a fin de cuentas me ha ido bastante bien. Será que soy demasiado exigente? o bien perfeccionista? o bien un conchesumadre que pide fiado y finalmente llegó el momento de pagar la cuenta...? -Aunque dudo que sea esta última. Pero aun así, me siento raro. O bien, estar de vuelta se siente raro. Lo que todo el mundo espera al volver de un viaje es encontrar todo tal cual estaba cuando lo dejó (aunque mi pieza era un verdadero caos antes de partir, aún así me gustaba, era MI orden caótico). Digamos que este no fue el caso. Volví y me habían cambiado hasta la decoración, el cubrecamas y el orden de algunas cosas... Desde ese momento supe que el estar aquí, hoy, en Valparaíso, era producto de decisiones tomadas a la ligera, y que debo marcharme cuanto antes... Lo mejor del caso es que los días que siguieron tenían el mismo cariz en rojo que me hacía sentir que estaba en un lugar extraño, ajeno. Valpo ya no me pertenecía...

Digamos que la sensación de asco general, escalofríos y temblores corporales que acompañaban este nuevo estado de no-pertenencia hacían el asunto mucho más entretenido, más didáctico, si es que se quiere. A quién no le gusta sentirse pésimo de vez en cuando, porque usualmente -"usualmente"- después de sentirte mal, te sientes bien, aunque siempre existe el margen de error de los casos terminales, en los que sólo aumenta la desazón y el malestar hasta que la vida se extingue -alegría alegría-.

A dónde iba con todo esto? -ven a lo que me refiero con eso de que el papel te la gana-. Pues, me harté de algunas cosas, y quiero empezar otras nuevas. Cambios, se vienen cambios. Me duele la cabeza y el viento golpea fuerte contra la ventana, a pesar que afuera el sol aletarga todo movimiento y la calle parece muerta de verdad.

Luz, cámara, Acción! (Paso 2: selecciona tu nombre personalizado) Siempre me pongo a pensar qué cresta poner cuando dicen algo así. Correos, sitios, foros, paginas de redes sociales, etc etc etc... siempre piden tu nombre, o bien un nombre ingenioso por que de seguro que el tuyo ya está porque son miles los nombres que se repiten.
Cómo carajos voy a llamarme ahora? pipe rotten, rotten, gabbo, mago, pichulotote o Motumbo? esa wea de los nombres debería dejar de ser. Es la principal razón por la que no me gusta.

Veamos, me perdí, me fui a otro lado... en resumen, Volví. Pero ahora me voy nuevamente. Me alejo de las redes sociales; no estaré ni en FB in en Twitter, ni en ninguna parte. Si me dan escalofríos puede que lo comente por este espacio, pero más allá lo dudo. Nos vemos, damas y caballeros, bon apetit, cómanse los restos de esta humanidad inservible. Y váyanse al carajo un rato, quieren?

Bitácora del Capitán: Marzo 29, 2011. 15:31
-The kids aren't allright